Alimentación en las Artes Marciales
Después de un largo tiempo sin escribir artículos, volvemos con un nuevo tema que esperamos que a muchos les guste. Debo confesar que en los últimos tiempos no he seguido casi nada de lo que trata este nuevo artículo, ya que en las salidas con amigos, siempre hay pizzas, sándwiches y hot dogs gigantes. Pero bueno, vayamos al grano.
Para un artista marcial, es esencial acompañar el entrenamiento con una dieta adecuada, ya que actúa como complemento. Sin ella, no tiene sentido entrenar durante horas si luego vamos y comemos comida chatarra que no nos beneficia en nada.
Para entender correctamente la nutrición, debemos comprender algunos conceptos básicos. Toda comida está compuesta de carbohidratos, proteínas y grasas. A continuación, explicaremos brevemente cada uno de ellos:
Carbohidratos: se pueden clasificar según el almidón y los azúcares. Todos los alimentos que contienen carbohidratos ingresan a nuestro torrente sanguíneo en forma de azúcares, dado que el almidón se convierte en azúcar durante el proceso de digestión. Una vez en nuestro cuerpo, los carbohidratos se queman lentamente y se combinan con oxígeno en nuestros pulmones. Este proceso genera la energía que nuestro cuerpo necesita, conocida como oxidación.
Proteínas: se clasifican en dos tipos, completas e incompletas. Las proteínas desempeñan funciones metabólicas y reguladoras, principalmente en las células, y forman parte de la estructura básica de los tejidos. En la dieta, se utilizan para la formación de nuevos tejidos o para reemplazar las proteínas ya presentes en nuestro cuerpo. Las proteínas completas se pueden encontrar en la leche, el queso, los huevos, la carne, la soja, los cacahuetes y algunos frutos secos, mientras que las incompletas se encuentran en las lentejas, el maíz, los guisantes, algunos frutos secos y la gelatina. Nota: los huevos contienen tanto proteínas completas (yemas) como incompletas (claras).
Grasas: son indispensables en nuestro cuerpo, por lo que no se pueden eliminar al 100%. Además, sería casi imposible hacerlo. Al igual que los carbohidratos, extraemos la energía necesaria para nuestro cuerpo de las grasas. Existen diferentes tipos de grasas, como grasas saturadas, monoinsaturadas y poliinsaturadas, pero cada uno debe investigar un poco acerca de ellos.
La idea es que cada uno investigue un poco acerca de estos tres componentes para complementar el artículo. Lo que hemos explicado hasta ahora es solo una breve descripción de cada uno.
Al entrenar, nuestro cuerpo necesita cada vez más energía para funcionar correctamente, por lo que debemos ingerir una mayor cantidad de alimentos. Algunos se preguntarán: \"Si como más, ¿afectará el efecto de mi entrenamiento simultáneamente?\" Es una contradicción, ¿verdad? ¿Mientras más entrene, más debe comer? Pues bien, aquí es donde entran en juego las tres definiciones que hemos mencionado anteriormente. Debemos ajustar nuestra alimentación según la cantidad de ejercicio que realizamos y con qué fines.
Además, es importante tener en cuenta que el tipo de entrenamiento que realizamos también influye en nuestra dieta. Por ejemplo, si estamos enfocados en aumentar nuestra resistencia y mejorar nuestra capacidad cardiovascular, debemos enfocarnos en consumir una mayor cantidad de carbohidratos complejos, como los que se encuentran en los cereales integrales, verduras y frutas. Por otro lado, si nuestro objetivo es ganar masa muscular y fuerza, debemos asegurarnos de consumir una cantidad suficiente de proteínas, ya sea a través de alimentos como huevos, carnes, pescados y lácteos o mediante suplementos.
En cualquier caso, es importante recordar que no hay una dieta única que sirva para todos. Cada persona es diferente y tiene necesidades nutricionales distintas, por lo que es fundamental buscar el asesoramiento de un nutricionista especializado en deportes y artes marciales para diseñar una dieta que se adapte a nuestras necesidades específicas.
En conclusión, la alimentación es un aspecto fundamental en el entrenamiento de las artes marciales y deportes en general. Una dieta adecuada puede mejorar nuestra capacidad de entrenamiento, ayudarnos a alcanzar nuestros objetivos y mantenernos saludables. Por ello, es importante conocer los conceptos básicos de los diferentes nutrientes y cómo combinarlos en nuestra alimentación diaria para lograr un equilibrio adecuado.
